Shame

Aún hoy en día las adicciones no son tomadas todo lo en serio que deberían en nuestra sociedad. Se ven como pequeñas faltas, muchas veces hasta como simpaticos incidentes que nos ayudan a pasar el día a día. Pero el ser una persona adicta no tiene ninguna gracia, aunque sea al sexo como nos relata Steve Mcqueen en su última película.

En ella conocemos a Brandon un ejecutivo asentado que no es capaz de pasar más de una hora sin llenar su cabeza con sexo en cualquiera de sus variables posibles, ya sea por internet, por revistas, por autosatisfacción o por supuesto por consumación. El sexo no visto como una meta o una satisfacción sino como un alivio momentaneo e insuficiente.

Me gusta de la película como muestra que cada uno cargamos con nuestros demonios, en mayor o menor medida y como el darle salida de forma irracional es una vía de escape más común de lo que estamos dispuestos a admitir.

Hugo, Scorsese y el cine


Martin Scorsese no es solo uno de los mejores directores vivos, es también amante cinéfilo sin igual, por eso aparte de sus películas ha dedicado varios documentales a recorrer diferentes cinematografias como fueron A personal journey through American movies e Il mio viaggio in Italia .

Pero no es esta su labor más importante ni mucho menos, su obra como mecenas y conservador del cine se lleva acabo a través de su fundación World Cinema Foundation , allí ha rescatado del olvido muchas películas como una que comenté aquí, El manuscrito encontrado en Zaragoza u otras muchas que ha restaurado y ha salvado de su desaparición.

¿Y a cuento de que viene hablar de esto? Pues porque su última película Hugo nos rescata la historia de Meliés, uno de los precursores del cine, a través de los ojos de un niño huérfano. La película es una maravilla, es el ejemplo de como se pueden emplear bien los millones de una superproducción, contar una historia con gancho, muy dinámica, hacer un homenaje al cine mudo y divertir por igual.

Atentos también para cuando salga la edición en DVD, he estado leyendo entrevistas con el equipo de fotografía y efectos especiales y ver un documental de como se hizo puede ser realmente espectacular.

El Dorado (1992)


El dorado nos presenta la historia de un grupo de conquistadores españoles que se lanza a la aventura de encontrar este mítico lugar que nombran los indios donde todo esta hecho de oro. La expedición poco a poco va convirtiéndose en una locura donde llegan incluso a renunciar al Rey de España y declararse independientes.

La película fue la más cara de la historia del cine español en la fecha de su realización. No fue bien acogida por el público ya que se estrelló en taquilla solo generando perdidas, como tampoco lo fue entre la crítica. Los premios también le dieron la espalda a esta superproducción ya que fue nominada a 9 premios Goya y no se llevó ninguno.

 No tiene ningún momento álgido pero no se puede decir que sea una mala película, así en la lejanía no puedo entender porque la película fue tan maltratada en su época. Lo único que si me parece lamentable es el vestuario, cuando empieza la película se supone que llevan ya varios meses varados en la selva y durante ella transcurren muchos más y en ningún momento las armaduras de los protagonistas o sus trajes dejan de estar relucientes lo cual le resta mucha verosimilitud.

 Tampoco se puede mejorar mucho esa opinión si se distribuye mal, he tenido ocasión de verla en VHS (original, no grabado de la televisión) y es aberrante que no este en su formato original. Rodada en panorámico esta copia estaba "adaptada" para televisión, o sea comiéndose las bandas negras de arriba y abajo por lo que muchas veces hablan personas que no están en el encuadre o se ve solo un trozo de su rostro. No se como se habrá distribuido en DVD aunque tampoco seria una sorpresa que lo fueran vuelto a hacer mal.

 Sobre esta aventura de El Dorado me parece mucho más recomendable la película que rodara Werner Herzog "Aguirre, la cólera de Dios" trata sobre este mismo episodio pero muestra mucho mejor la transición a la locura de los personajes y de Aguirre en particular

J. Edgar

Cuando uno habla de Clint Eastwood mínimo debería ponerse de pie, ejemplo claro de la madurez de un artista (que al principio no era ni mucho menos) que ha sabido jugar con las reglas del juego participando en películas realmente sonrrojantes solo para adquirir una posición y a partir de ahí guisarselo y comerselo (o sea producirselo) él todo.

Nunca exito de taquilla rimbombante pero nunca fracaso sus películas de los últimos 20 años son historia viva, como muchas otras anteriores, pero estas quizás escondidas entre films muy comerciales. Ha llegado hasta un punto donde ha podido hacer el biopic de todo un jefazo del FBI durante 48 años como le ha dado la gana.

J. Edgar fue hombre recto, serio, innovador pero obtuso hasta la médula. Hasta tal punto que se negó su propia felicidad porque no era del modo que su madre le había enseñado. Ejemplo claro de como las leyes se deben cumplir, pero como sin mano izquierda seriamos todos robots.

Quizás este discurso le ha costado a Eastwood no tener ninguna nominación este año a los Oscars, cuando realmente la merecía al igual que el gran maldito de esta ceremonia, el generalmente excelente Di Caprio. Y es que los obtusos siguen estando en forma de jueces en muchos ambitos de la sociedad americana.