Six feet under

Cuando algo era una maravilla, lo era hasta en las promos. Si habeís visto la serie se os pondrá la piel de gallina seguro

Salamanca

Finalmente parace que he tenido suerte y el año próximo volveré a cambiar de rumbo, mi destino una ciudad que no he visitado nunca pero que parece prometedora. El año que viene me iré de Séneca a Salamanca.

Esperar tener tanta suerte en todos los aspectos como tuve el curso pasado en Florencia es seguramente esperar demasiado, pero que necesitaba un cambio de aires es evidente. Quizás algún día encuentre estabilidad en algún lugar, quien sabe.

Federico Fellini

Federico Fellini es de esos nombres que estan en boca de todo cinéfilo pero al que nunca me había acercado. Este mes filmografía al hombro y con dos libros como apoyo y guía pienso poner fin a esta carencia.

Lo primero que me ha llamado la atención del italiano es su amor por la fábula, ya conocía ese aspecto en su cine pero no en su vida real. Federico tenía tendencia a crear su propia biografia, sus recuerdos no eran algo inamovible, los iba creando según su estado de ánimo y de ahí que cayera en numerosas contradicciones en sus declaraciones a lo largo de su vida. Su amor por el circo le llevó a decir que había trabajado en uno cuando en realidad quizás solo estuvo una tarde o a decir que había estado en un internado cuando había sido el caso de su hermano, por ejemplo. Una mente inquieta sin duda.

Después de una carrera como caricaturista y guionista se lanzó a la dirección junto a un buen amigo, Alberto Lattuada. De ahí surgió Luci del Varietá una película acerca del mundo del vodevil rodada con bastante humor aunque con un resultado comercial y crítico bastante pobre. A mi me ha parecido una película correcta, que te contagia con el amor por los artistas que destila, aunque ninguno de ellos sea precisamente alguien de quien tomar ejemplo.

Después de este fracaso Federico se refugió de nuevo en la escritura de guiones para recuperarse economicamente y dar el salto a su primer trabajo como director en solitario.

El manantial


Aunque de este tema ya escribí algo hace tiempo no ha dejado de interesarme. Esta noche lo tengo de actualidad gracias a la película El manantial, de King Vidor. Consiste en la propiedad de las obras, aunque yo lo trascendería a nuestra propia formación como personas, a la creación de un criterio propio.

En la película tenemos un creador aferrado a su obra y que no le importa caer con tal de defender su forma de pensar. El resto de la gente es dominada por los poderosos, que dictan lo que es bueno, lo que es malo y como se deben adaptar las cosas para tener un “gusto universal” . Esto es algo que a lo largo de la historia dijeramos que se ha ido perfeccionando hasta llegar a los niveles superlativos de hoy en día donde gran parte de la gente sigue este viejo modelo dijeramos de seguir lo más visto, otros engañados por la supuesta libertad infinita que otorga la red se piensan libres cuando estan igual de ciegos ante el sistema. También existe una gran mayoría que lee sin criterio, todo lo que diga tal o cual medio me fio, aunque sea un titular.

Para mi la gran baza de hoy en día es la cantidad ingente de información a la que tenemos acceso, es tanta que nos despista y al resultar imposible comprobarlo todo hacen con nosotros lo que les viene en gana. Y lo bien educados que estamos a no protestar.