¿Os imaginais que a Goya le hubieran dicho como pintar sus cuadros? ¿Que a Bob Dylan le hubieran cambiado sus productores la letra de Blowin´ in the wind?
Pues eso es lo que lleva pasando en el cine desde tiempos preteritos, productores que cambian finales o eliminan escenas son un ejemplo de ello. La mala costumbre de no tener el cine como una obra de arte ha llevado por estos caminos. En este video justo después de los créditos podemos ver una simpatica anécdota que le ocurrió a Dalí y que sirve para ilustrar perfectamente lo que quiero decir.
Es un extracto del principio de Cineastas en acción, documental que complementa a Cineastas contra magnates y que nos sirve para ver esta y otras muchas cuestiones del ambito audiovisual.
Etiquetas: Mi cine
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1 comentarios:
-guiño y sonrisa-
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