Nunca en domingo


En la vida sobre todas las cosas todos tenemos una meta y esta es la felicidad. Pero.. ¿esta tiene una receta? Durante toda nuestra existencia nos enfrentamos a los medios de comunicación que quieren enseñarnos un camino a seguir, a personas que parece que su único interes es convencer a otras para que vivan la vida exactamente como la hacen ellos...

En Nunca en domingo Jules Dassin lanza una oda a la libertad de elección, no hay nada mejor que ser autenticos, que vivir acorde a nuestra forma de ser e importandonos bien poco lo que los demás puedan pensar de nosotros. Todo esto salpicado de una Melina Mercouri en estado de gracia y una música inolvidable.

Porque ¿acaso tienen que saber los pájaros escribir melodias para ser felices?

1 comentarios:

Miguel dijo...

No la he visto, pero has citado dos palabras que tengo muy presentes siempre. Primero: Felicidad. Es verdad que es el objetivo de todos nosotros. Sobre lo que entiende cada uno por felicidad es otra cosa. Y sobre ser "auténtico" es otra palabra que en los últimos dos meses he escuchado mucho desde dos puntos de vista. El primero que te explicaba cómo se forma una persona auténtica con sus características individuales. La segunda, de personas que su forma de que seas auténtico es que seas como ellos creen que seas para ser auténtico. Cuando pienso, que ya no lo eres.

En fin, que me has tocado la fibra en un post de cine.

Ya sigo comentando.

Saludos, cugino.