Créditos


Una de las muchas facetas que veo hoy descuidadas en las películas son los títulos de crédito, se limitan a ser las serie de letras aburridas pasando una detrás de otra sin tener nada más.

Hubo un tiempo donde gracias a maestros como Saul Bass nos invitaban a algo más con ello. Un ejemplo bastante simple y efectivo son los títulos de crédito de Psicosis, donde vemos que cada nombre que sale en pantalla se divide en dos, anticipandonos cual será el problema y secreto de la doble identidad del protagonista.

Todo esto unido al acompañamiento de una música inquietante de la que ya hablaremos otro día.

3 comentarios:

contu dijo...

Razón tienes en lo olvidados que están los títulosde crédito hoy en día, pero entiende que ahora se deja todo para el final, cuando antes todos los nombres solían ir al principio.
Me ha hecho ilu leer tu entrada porque me ha recordado un nombre de cuando yo era cinéfilo; una de las cosas que uno acaba sabiendo, y que parecen diferenciarlo del resto de los cinevidentes, es saber por ejemplo quién es Saul Bass. Yo ya le había olvidado y ahora le he recordado. También he recordado que me molaban mucho los títulos de "Anatomía de un asdesinato", peli poco rememorada a mi entender, y los de "Vértigo", qué más voy a decir.

Pues algo más voy a decir, que un abrazo muy grande,

JimLovell dijo...

No he visto Anatomia de un asesinato, pero nada menos que con Otto Preminguer y James Stewart promete mucho, le echaré un ojo pronto.

Tienes razón, soltar un par de nombres y que sean identificados lejos de el sentimiento este pedante con el que esta la cosa identificada a mi me da familiaridad y ganas de seguir hablando. Odio este sentimiento que esta hoy en boca de todos y que parece que te da derecho a opinar de todo, ya sea cine, física cuantica o arte, el "para gustos estan los colores"

Muchas gracias por tu abrazo contu, en estos días es especialmente reparador, otro para ti

Miguel dijo...

Incluso algunas pelis se guardaban unos últimos fotogramas para después de los títulos de crédito...

Por cierto, Anatomía de un asesinato: OBRA MAESTRA.

Un abrazo para todos.